
Aunque le pusimos todo nuestro empeño, Mysha no ha podido seguir luchando y nos ha dejado.
Esta gatita es uno de esos casos complicados que nos ha encogido el corazón y que nos ha tenido en vilo, y aunque lo último que perdíamos era la esperanza, sabíamos que su situación era complicada.
Al menos, nos queda que ha vivido sus últimos días acompañada y recibiendo todo el cariño y las atenciones que ha necesitado.
Descansa en paz pequeña.