
Éramos el mundo y alguien nos lo arrancó
de las manos
un día de oleaje oscuro.
(Extracto del poema “El estómago de las guerras” de Marta Navarro
Hoy nos hemos despertado con la peor de las noticias y estamos en estado de shock, Homer, nuestro pequeño Homer nos ha dejado de manera repentina.
De momento no tenemos más información hasta que se le puedan realizar las pruebas pertinentes para conocer la causa, pero queremos agradeceros a todos y cada uno de vosotros que os habéis implicado tanto, todo el cariño recibido en su nombre.
Homer hoy va por ti, porque llegaste en la peor de las situaciones y a pesar de todos los esfuerzos la muerte ganó la batalla, pero te vas con las maletas llenas de cariño, apoyo, y empatía.
Tu muerte nos enseña que el respeto a la dignidad de los animales no depende de una presencia, pocos tuvimos la ocasión de rozar tu piel, pero muchos, muchísimos han alzado sus voces para manifestar su indignación contra la desalmada actuación de alguien que finalmente ha provocado tu muerte.
Una indignación que no se detiene únicamente en quienes agreden, una indignación por quienes no hicieron caso de la llamada de auxilio, una indignación porque ya es hora de que las instituciones, los poderes públicos asuman de una vez por todas sus responsabilidades y se tomen en serio esta lacra social que es el maltrato animal.
El maltrato animal es la degenaración de este mundo, y dura ya muchos siglos. Descansa en paz, Homer.
Un abrazo,
Desgraciadamente así es.
Un abrazo Marta,